La Iglesia de San Jaime, patrón de la ciudad, se aposenta en la cúspide del casco antiguo, en el cerro denominado Canfali. Construida en el siglo XVIII, coronada con una cúpula azul de estilo mediterráneo es de estilo neoclásico. En su interior alberga un símbolo fuertemente entroncado con los creyentes oriundos, la Virgen del Sufragio, patrona de Benidorm. La Virgen cuenta allí con una capilla donde se puede ver la pequeña talla que fue encontrada en una barca a la deriva en el mar.
En 1595 comenzaron las obras que se prolongaron a lo largo de los siglos XVII y XVIII. El conjunto monástico estaba constituido por tres elementos: la Capilla de la Venerable Orden Tercera, la Iglesia y el Convento (derribado en 1974). La antigua capilla fue edificada entre 1758 y 1762, bajo los influjos del neoclasicismo, es única en la provincia de Alicante, puesto que no existe otro ejemplo de capilla construida como una iglesia independiente adosada al templo principal y es la sede del Archivo Histórico Municipal: el documento más antiguo que se conserva es de 1350. El templo se desarrolla a través de una única nave, con una barroca decoración con motivos vegetales y angelotes. Actualmente es conocido como El Teatret y es sala de exposiciones, conciertos y conferencias.
Los orígenes del templo se remontan a 1588, aunque su estilo actual es neoclásico. Tiene planta de cruz latina, con tres tramos y capillas, sin cúpula, con una bóveda vaída sobre el presbiterio y coro añadido a los pies, en el primer tramo de la nave. La capilla de la Comunión está a un lado del altar mayor, cerrando el rectángulo de la planta. El templo fue quemado en 1936 y reconstruido posteriormente. Destaca el retablo clásico del altar mayor, con columnas corintias. Paredes de mampostería y cubiertas inclinadas de teja.
Es el edificio más emblemático de la población. De estilo barroco (1776). En su interior guarda la imagen del Ecce-Homo del s. XVI y patrón de la localidad. Antiguamente fue un hospital que también albergaba viajantes y peregrinos.
Fue fundado en el año 1664. Ocupaba lo que hoy son las oficinas de la policía local y residencia de ancianos. Tenía una iglesia de una sola nave, amplia y capaz. El convento era sólido, con un patio central diminuto, de estilo renacimiento sumamente sencillo, de la segunda época alcantarina. La vida en este convento se deslizo tranquila hasta el siglo XIX, en que tuvo que disolverse la Comunidad durante la invasión francesa. Pasada ésta, de nuevo se reúnen los religiosos hasta que fueron exclaustrados en 1835 por la desamortización de Mendizabal. El Ayuntamiento se incautó del edificio, que fue destinado a Juzgado de primera instancia, cárcel y hospital. La iglesia siguió abierta al culto y servida por los religiosos exclaustrados. Uno de esos religiosos, el P. Pedro Barrachina montó una escuela pública. La restauración del convento de Pego se debió a la iniciativa de sacerdotes de la localidad que instaron a los superiores a que reabrieran el convento. En 1891 el Cardenal Monescillo, Arzobispo de Valencia firmó la licencia de apertura. A finales del mismo año llegaron dos religiosos, que se establecieron provisionalmente en la casa del sacerdote D. Pascual Server. En 1892 se puso la primera piedra del nuevo convento. Dirigió las obras Fray Mateo Company, según los planos del arquitecto D. Joaquín Arnau. La iglesia, de estilo gótico, fue bendecida en 1901 y dedicada a la Sagrada Familia. Hasta 1909 estuvo en este convento el seminario mayor franciscano. En 1910 se arregló la plaza frente al convento y se erigió un Via-crucis. Se legalizaron las escuelas conventuales. En 1925 se adquirió un órgano y se doraron los retablos de las capillas laterales. En 1929 se reformó el altar mayor. Durante la República de 1931-36 no se cerró la casa de Pego y fue destinada a noviciado. Pero en 1936 el edificio fue ocupado por los comunistas, muriendo mártires de la fe los Hnos. Buenaventura Botella, Antonio Ribera y Sebastián Ferrer. El 9 de abril del 39 fue reconciliada la iglesia, abriéndose al culto. El altar mayor pudo estar restaurado en 1942. Fue erigida parroquia en 1953.
Ubicada en la plaza mayor. Su fachada principal es de estilo barroco, se empezó a construir en 1734 y su construcción finalizó el año 1752. Su interior tiene forma de cruz latina y gran parte de sus sillares forman parte del antiguo templo que se encontraba a los pies del castillo en el actual teatro principal. La capilla de la comunión se construye con posterioridad a la iglesia, se puso la primera piedra el 17 de junio de 1897 es de estilo bizantino y fue inaugurada el 3 de septiembre de 1899, coincidiendo con las fiestas de la reliquia. Durante la guerra civil parte del campanario fue derruido hasta la base de las campanas. En 1950 se inició su reconstrucción, finalizando ésta un año después. Se procuró que fuese igual al anterior, aunque el actual es de cemento y antes tenía piedras de sillería en sus esquinas, tal como está la parte no derruida del mismo. El reloj actual se instaló en 1951, tras la reconstrucción del campanario.
Ubicada en la calle del mismo nombre. Su construcción se llevó a cabo sobre el antiguo cementerio de la localidad. En 1984 se llevaron a cabo las correspondientes gestiones para proceder a la recuperación de la ermita, la cual se encontraba en el Molí Sol. Se desmontó piedra a piedra y se trasladó a su actual ubicación en la calle San Jorge. Su estilo arquitectónico es el neogótico, la planta es de nave única y rectangular con un ábside al fondo con dos vidrieras, cuyos motivos tratan el tema de San Jorge, Banyeres y la fiesta. Se trata de un edificio aislado, realizado en piedras de sillares, tejado a dos aguas de acusada pendiente, cubierto con pizarra. La fachada, se encuentra orientada hacia el norte, se enmarca en dos pilastras con capiteles y pináculos situados en las esquinas.
La parroquia está localizada en la plaza de la Constitución de Biar, justo en frente del ayuntamiento. Se sospecha que se levantó encima de la antigua basílica cristiana, construida tras la conquista, y que se encontraba encima de la antigua mezquita musulmana. Casi con seguridad su construcción empezó en los últimos años del siglo XV, en el gótico tardío, como se puede ver en las bóvedas estrelladas de la nave central. Sin embargo, los trabajos se prolongaron a traves de los siglos, por ejemplo, la portada plateresca (1519), la capilla de la Comunión churrigueresca y el presbiterio son del siglo XVI, mientras que la torre ya avanza hasta el siglo XVIII.
En Altea, en la Urbanización Altea Hills, se encuentra la primera Iglesia Ortodoxa Rusa construida en España. Construida en madera, la iglesia es muy pintoresca y muy agradable de visitar. Si no hay alguna ceremonia, podrás visitarla por dentro. Si estás por la zona, la visita es curiosa y no debes perdértela. Todos los materiales han sido traídos para su construcción desde Rusia, y construida con mano de obra rusa. Todo no. Las campanas son españolas. Disfruta de una iglesia sin igual en toda Europa en Altea.
La Parroquia de San Juan Bautista, en el corazón de San Juan de Alicante, es un emblemático templo que combina historia y belleza arquitectónica. Construida en el siglo XVIII, destaca por su estilo barroco, su fachada majestuosa y su imponente campanario, visible desde varios puntos del municipio. En su interior, se encuentran bellos altares, frescos y detalles ornamentales que reflejan el arte sacro de la época. Este lugar de culto es también un importante centro de tradición y espiritualidad, especialmente durante las fiestas patronales. Su entorno, rodeado de plazas y terrazas, invita a disfrutar del encanto del casco antiguo.
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