Esta ruta cicloturista discurre por la antigua vía del tren Agost-Alcoy, que nunca llegó a ser operativa, reconvertida hoy en Vía Verde. Tiene una longitud de 22 Km, con un desnivel de 400 m y un firme perfectamente acondicionado y señalizado para la circulación de bicicletas y peatones. Cuenta con 6 túneles y 2 viaductos, que le dan mayor encanto. El gran atractivo de la ruta, junto a la sencillez de su trazado, son sus paisajes cambiantes. Se inicia en los casi desérticos saladares de Agost, con sus colores blancos por la sal y ocres y rojizos por las arcillas que se extraen para la industria alfarera del municipio. Allí las sosas y “salats” luchan por sobrevivir junto a lagartos, alondras, culebras, etc. Todas ellas están perfectamente adaptadas a esta aridez. La ruta va ascendiendo progresivamente, salvando túneles y ramblas, de gran belleza, hasta adentrarse en las laderas de la sierra del Maigmó, donde aparecen los bosques de pino carrasco, con coscoja, lentisco, espino negro y otras especies, en las que habitan perdices, zorros, chovas piquirrojas, pitos reales o águilas reales, que buscan algún conejo con el que alimentarse. La Vía finaliza junto a la autovía Alicante-Alcoy, a los pies del Maigmó. La Vía cuenta con 6 túneles no iluminados, dos viaductos, dos puentes, tres zonas de descanso con bancos y mesas, aparcamiento en el Kilómetro 22 y cartelería informativa e interpretativa a lo largo del recorrido.
Dificultad: baja Distancia: 275 m La ruta recibe el nombre del “monumento natural" que encontramos al final. Se trata de la Falla del Moraig. La senda alcanza un mirador desde donde se avista hacia el norte toda la Cala del Moraig desde una nueva perspectiva, con el Cap de la Nau al fondo. En su tramo final alcanza una zona de interés geológico, que ofrece la Falla del Moraig, la Vasenilla y las formaciones y drenajes esculpidos por el agua y los movimientos tectónicos. La visita descubre un rincón sorprendente. Características: Tipo de ruta: lineal. Lugar de inicio: situado en la mitad de la bajada a la Cala del Moraig. Tiempo estimado: 30 min. ida y vuelta. Interés: natural y paisajístico. Puntos de interés: La Vasenilla Falla del Moraig Riu del Moraig
estuve con unos amigos y lo pasamos muy bien
Disfruta de la brisa y calidez que te brinda el mar de Benissa paseando por este sendero ecológico. Los cuatro kilómetros de costa benissera son escarpados, con acantilados y pequeñas calas invadidas por pinos. Este litoral está recorrido por un paseo ecológico con varios tramos que puedes recorrer prácticamente durante todo el año debido a la benignidad del clima. Si visitas Benissa, éste es uno de los recorridos que no te puedes perder. Es un sendero que recorre prácticamente todo el litoral y que está dotado de paneles informativos que describen aspectos de la cultura e historia local, así como su fauna y su riqueza botánica y geológica. Puedes hacerlo entero o simplemente dar un paseo por uno de sus itinerarios ambientales, hasta una cala. El PASEO ECOLÓGICO es el mejor viaje que puedes hacer por la costa de Benissa. El punto de partida es la Tourist Info Benissa Playa - Aula de la Mar que está en la Casa dels Cent Vents. Consta de dos itinerarios, sur y norte, y el Paseo recorre todo el litoral con paneles informativos que van describiendo diversos aspectos de nuestra cultura local, nuestra historia, o nuestra riqueza botánica o geológica en lo que es un agradable paseo de baja dificultad. Inicio de la ruta: Tourist Info Benissa Playa - Aula de la Mar | 38°39'49.2"N 0°05'15.0"E Duración: 45’-1 h | Distancia: 3,5 km | Grado de dificultad: baja T. Info Benissa Playa - Club Náutico Les Bassetes. 0,6 kms T. Info Benissa Playa - Club Náutico Les Bassetes. 0,6 kms: Este trayecto nos acercará a elementos de patrimonio natural y cultural como los restos de una antigua cantera de extracción de eolianita, comúnmente conocida como “piedra tosca”, utilizada para la construcción de edificios como la Sala del Consell (S. XVI). Hay una microreserva medioambiental con especies botánicas singulares, como la jarilla de cabeza de gato y el tomillo cabezudo. En cuanto a sus servicios, allí encontramos el Club Náutico Les Bassetes, una escuela de vela y otra de buceo, y dos restaurantes. Tourist Info Benissa Playa - Cala Advocat. 2,9 kms.: La primera parada del camino es la playa de la Fustera, una encantadora y familiar playa de arena cuyos cristalinos fondos están dominados por la posidonia. Puedes disfrutar durante todo el año de servicio de chiringuito. El itinerario prosigue hasta alcanzar la Cala dels Pinets, pequeña y de carácter salvaje. Posee cantos rodados y grandes rocas planas. En verano puedes hacer una excursión hasta llegar a la "Mar Morta i Roques Negres", de gran interés paisajístico y geológico. ¡Recuerda llevar escarpines! Desde aquí, el siguiente tramo de la ruta continúa por el interior hasta enlazar con la siguiente cala. El recorrido está señalizado con marcas de sendero azul y blanco. Comienza en la C/ Pinets en dirección a la Avda. La Marina, único tramo asfaltado, y continua por la derecha, por un camino que limita con la zona verde de Fanadix, una pinada con servicios de merendero habilitados (baños públicos, mesas, parque infantil y parque biosaludable). Siguiendo las señales, el sendero se adentra por una zona no urbanizada, cruzando el barranco de la Llobella hasta llegar a la C/ Camamirla, que da acceso a la Cala de la Llobella. Llegados a este punto, nos desviaremos a la derecha para visitar la Cala de la Llobella y después regresaremos al mismo punto para continuar hacia la Platgeta de l’Advocat. La Cala de la Llobella es de cantos rodados y su difícil acceso la convierte en un lugar muy tranquilo y apta para la práctica de deportes subacuáticos, mientras que la Platgeta de l’Advocat se caracteriza por un pequeño espigón que la protege del oleaje y por disponer de una pequeña playa de arena y un maravilloso entorno submarino. Además, en verano cuenta con un chiringuito. Desde aquí la ruta prosigue en sentido norte por una zona de espectaculares acantilados litorales que son un precioso balcón natural al Mediterráneo. Acabamos en el Parque Biosaludable, un lugar con vistas donde se puede practicar gimnasia en sus máquinas de ejercicio. En las inmediaciones hay una zona verde que es refugio de diferentes especies típicas mediterráneas. Actualmente no existe conexión con la última de las calas, Cala Baladrar, también de cantos rodados y con abundante vegetación en los diferentes desniveles rocosos que la enmarcan hasta descender al mar. En su origen era la desembocadura del "barranc dels Sesters" y un entrante natural que la divide en dos, la propia Cala Baladrar y la Goleta. A lo largo del paseo observaremos en el mar manchas oscuras. Son las praderas de posidonia oceánica, una importante planta marina, exclusiva del Mediterráneo y protegida, pues da refugio a numerosas especies marinas, que se alimentan, se reproducen y se cobijan en estas praderas. Además, estas plantas filtran y oxigenan las aguas, siendo un indicativo de su buena calidad. Su función es vital.
preciosos todos nuestros castillos.
Se trata de una ruta familiar con el punto de salida situado en la Plaça Jaume I. Ya fuera del municipio encontrará otros elementos de gran valor histórico y patrimonial como el llavador del pou d'avall, la Ermita de Santa Ana, el riurau del tio Joan de Vallesa, el pont del Quisi y el Molí del Quisi. Sendero circular de dificultad media. El molí del Quisi está considerado como una de las obras hidráulicas más importantes de la zona. Construido en el siglo XV y utilizado hasta 1930, parcialmente excavada en el talud del terreno que sustenta el área donde se embalsa el agua, aprovechando el gran desnivel para obtener presión para el movimiento de las turbinas.
Para poder hacer las Vías Ferratas es necesario pedir autorización en esta web: https://turismovillena.com/portfolio/vias-ferratas/ Las rutas combinan trayectos verticales con travesías horizontales. Están equipadas con grapas, parabolts, argollas, pasamanos, cadenas, cables y puentes colgantes. Además, es posible acceder a ellas realizando un rapel (descenso por las cuerdas) si se llega en coche hasta la cima de la Sierra de la Villa. La orientación de estas vías es al Sur, por lo que son idóneas para disfrutarlas en otoño, invierno y primavera. En verano sugerimos realizarlas de noche.
Bautizada como “La Clau del Regne” (La llave del reino) por Pedro IV de Aragón, El Ceremonioso, la plaza fuerte de Alicante ocupó una posición estratégica decisiva en la Guerra de los dos Pedros (1356-1369), que le enfrentó a su homónimo castellano, Pedro I el Cruel. Asomados desde las alturas del “Macho” del Castillo de Santa Bárbara, la explanada que ocupara la antigua Alcazaba, podemos volver a sentir la visión de dominio sobre el Mar Mediterráneo y el interior que disfrutaron los antiguos defensores de la fortaleza y la ciudad de Alicante. “La Clau del Regne” se acompaña de un ramillete de llavines singulares. Como la fortaleza de la isla de Nueva Tabarca, un recinto amurallado diseñado en 1769 para acoger y proteger a la colonia de 300 recolectores de coral genoveses rescatados de las garras del Bey de Túnez. Mutxamel, Busot, El Campello, el Santuario de Santa Faz y su torre o las que salpican la huerta alicantina son otros hitos de la ruta. Esta revela el constante diálogo entre la fertilidad agraria y las construcciones destinadas a la vigilancia o el combate, en un territorio codiciado por su riqueza y valor estratégico. - Alicante- Isla de Nueva Tabarca: Murallas y Puertas de Nueva Tabarca, Torre de San José. - Alicante: El Castillo de Santa Bárbara, Las murallas de la ciudad de Alicante, Fuerte de San Fernando, Torre del Monasterio de la Santa Faz, Torres de la Huerta. - Mutxamel: Torre de Mutxamel. - Busot: Castillo de Busot. - El Campello: Torre de la Illeta. - Aigúes: La Torre de Aigües.
Gran estratega y hábil negociador, Teodomiro, conde (comes) visigodo que ejercía de líder civil y militar de la región de Tudmir, un vasto territorio cuya capital era Auraiola (Orihuela), constituye la figura referencial de un itinerario histórico por el sur de la provincia de Alicante. A diferencia de otros reyes y señores que apelaban a la fuerza, Teodomiro recurrió al ingenio para evitar el asalto de las huestes del conquistador árabe Ibn Musa y, más tarde, negociar un pacto que le garantizó el control de los impuestos y un sometimiento sin sobresaltos al nuevo poder que se implantó en Al-Andalus. Las peripecias y la memoria de este prócer visigodo resuenan en uno de los recorridos con más alicientes históricos e hitos patrimoniales del territorio alicantino. Su epicentro se halla en Orihuela, la única medina asaltada por los vikingos, allá por el año 859, y cuyo ingente conjunto histórico artístico ha sobrevivido a toda clase de desastres, incluido el terremoto de 1829. Torres defensivas, castillos árabes y murallas se convierten en las ventanas que la historia abre al paisaje de la Vega Baja y a su eterno acompañante, el río Segura. - Cox: Castillo de Ayala o Palacete de Cox. - Callosa de Segura: Castillo de Callosa de Segura. - Orihuela: Las murallas de la Ciudad de Orihuela, Torre del Cap Roig - Guardamar del Segura: Castillo de Guardamar del Segura. - Torrevieja: Torre Cap Cerver o del Moro, Torre de la Mata. - Pilar de la Horadada: Torre de La Horadada.
Esta ruta ofrece al visitante la posibilidad de acceder a una experiencia radicalmente distinta. El relieve accidentado de las cordilleras prelitorales y la apacible vida de los pueblos de montaña se ofrecen como alternativa al bullicio costero. Las fortaleza subicadas en los roquedos y crestas calizas sobrevuelan espectaculares valles surcados por riachuelos feraces. En medio de este paisaje, especialmente recomendable para los amantes del senderismo, los platos de cuchara y el callejeo por pequeños pueblos, se erigen las fortalezas que controlara el mítico caudillo Al Azraq y que, más tarde, tras la reconquista cristiana, pasaron a manos de órdenes militares, como las de Montesa, Hospital o El Temple. La huella árabe sigue presente, en los recodos de las villas, antiguas alquerías, donde proliferan torres almohades, rehabilitadas como miradores para el disfrute contemplativo del viajero sin prisas. También permanece este eco oriental en los despoblados moriscos y en los recintos amurallados de las morerías de Alcoy o Cocentaina. Una huella indeleble, que constatan las líneas de bancales construidos con piedra seca y que riegan los caudales que discurren, desde azudes, por azarbes y acequias. - Benifallim: Castillo de Benifallim. - Torremanzanas: Torre de les Maçanes. - Jijona: Castillo de la Torre Grossa. - Tibi: Castillo de Tibi. - Onil: Castillo-Palacio fortificado del Marqués de dos Aguas. - Alcoy: Castillo de Barxell, Murallas de la ciudad de Alcoy. - Cocentaina (Visitas guiadas 2016): Murallas de la ciudad, Castillo-torre feudal, Palau Comtal, Castillo de Penella. - Agres: Castillo de Agres. - Almudaina: Torre de Almudaina. - Alcoleja: Palacio de Malferit. - Balones: Castillo de la Costurera o de Seta. - Planes: Castillo de Planes. - Lorcha: Castillo de Perputxent. - Vall de Gallinera: Castillo de Alcalá o de Benissili, Castillo de Beniarrama.
¡Descarga tu guía de Alicante!